Aunque sientas seguridad al momento de ir a una entrevista, también es normal que te sientas con stress o con emociones que puedan afectar este evento importante. Es común que el miedo nos invada, por ello, lo mejor que puedes hacer es conocer tus puntos fuertes y saber cómo gestionar las situaciones complicadas. A continuación, compartimos 6 consejos para controlar tus emociones en una entrevista de trabajo.
- Rompe el hielo: No temas romper el hielo con una conversación cotidiana que permita una conexión natural con el entrevistador, así tendrás una charla más amena y tranquila. Por ejemplo, puedes hablar de cómo estuvo el tráfico o el clima antes de llegar al compromiso o mencionar lo placentero y bonito del lugar de la entrevista, hazlo de forma espontánea y sin extenderte mucho.
- Prepárate: El miedo o la inseguridad al momento de realizar una entrevista pueden superarse con preparación previa. Tómate un tiempo para pensar qué te pueden preguntar o qué te han preguntado en instancias anteriores y cómo puedes mejorar o pulir esas respuestas. Algunas preguntas clásicas pueden ser conocer tus fortalezas, el motivo que te lleva a buscar un cambio de trabajo, expectativas de la posición, entre otras.
- Mostrar seguridad: Muestra que eres una persona segura, evalúa la situación y comprende que se trata de una buena oportunidad laboral, pero que pueden existir otras más que están por llegar, esto hará que la situación no sea tan tensa. Centra tus esfuerzos en demostrar que eres una persona con alta autoestima, que eres productivo y que sabes manejar situaciones de estrés sin sufrir ansiedad en el trabajo.
- Analiza tus debilidades y fortalezas: Cuando ya te sientes preparada para la entrevista, tienes mucha parte del camino hecho, ya que gran parte de nuestro nerviosismo lo provoca no tener los conocimientos para responder las preguntas del entrevistador. De esta manera, analizarte y ser capaz de determinar cuáles suelen ser tus puntos débiles y fuertes en el ámbito laboral, o incluso personal, te ayudará a interiorizar que tienes muchos puntos a tu favor y las debilidades e inseguridades, se rendirán ante tus fortalezas.
- Reconoce y comprende: Lo primero que debes hacer es reconocer por qué se generan aquellas emociones que puedes estar teniendo. El estrés, ansiedad, angustia, entre otras sensaciones tienen un origen interno. Conoce bien tus emociones para saber cómo manejarlas en la entrevista, y analiza que las origina para controlarlas de raíz.
- Evitar reprimir tus emociones: Es imprescindible saber que gestionar no significa reprimir, evita ese esfuerzo emocional que no es necesario y que puede hacer que no te muestres tal cual eres. Para ello es recomendable que te centres en mostrar todos tus puntos fuertes y tus aptitudes, respira hondo, confía en ti mismo, piensa y contesta correctamente todas y cada una de las preguntas del entrevistador.