El presupuesto es una herramienta que nos permite gestionar nuestros ingresos y gastos. Por ello, antes de armar un presupuesto recuerda trazar un objetivo, según ASBANC.

1° Ordena tus registros.
Guardar tus comprobantes de pago, te ayudará a mantener un control de lo que vas gastando.

2° Prioriza.
Si no presupuestas todas tus deudas, podrías olvidar pagar alguna de ellas, lo cual puede generar una mala calificación en la Central de Riesgo de la SBS.

3° Controla tus gastos.
Son los gastos que realizas mensualmente (luz, agua, colegio, etc), los cuales no deberían incrementarse. De esta manera podrás tener un excedente.

4° Reduce gastos.
Si tu presupuesto no te alcanza para pagar todas tus deudas, la primera opción es reducir tus gastos variables como las salidas al cine, ropa, diversión, entretenimiento, etc.

5° Ahorra
Destina siempre el 10% de tus ingresos netos al ahorro. El restante te servirá para pagar tus deudas y gastos fijos. En caso dispongas de un excedente, puedes utilizarlo para gastos variables.