Un duelo es el proceso activo, personal, de adaptación frente al cambio significativo ocasionado por la pérdida de un familiar, una persona amada o una situación importante que formaba parte de nuestra vida. En definitiva, vivir la experiencia de una pérdida, es sobretodo sentir profunda tristeza y siempre conlleva un cambio radical que incide en todas las facetas de la vida cotidiana, incluida la del trabajo. No obstante, por complicado que sea, se tiene que tratar de mantener la fortaleza, y aunque su duración es muy variable, cada persona tiene su propio ritmo y necesita un tiempo distinto para la adaptación a su nueva situación. A continuación, 8 claves para sobrellevar esta situación.

1. Mantener discreción: No divulgar tus problemas personales es un factor esencial para que éstos no contaminen tu vida laboral.  Es recomendable que tus compañeros de trabajo se mantengan ajenos a tu situación.

2. Buscar apoyo de familiares y amigos: Es importante saber que en ocasiones preferirás estar solo o acompañado, pero esto dependerá del momento. Es normal sentirte confuso y no saber qué es lo que deseas, ten paciencia, no te culpes y ve a tu ritmo.

3. No tomar decisiones apresuradas: Trata de evitar tomar decisiones importantes de forma precipitada, porque en ocasiones la emoción es la que intenta controlar esa decisión y no siempre es la acertada y la más beneficiosa para ti.

4. Aceptar recordar: Observa de manera gradual los recuerdos que te resulten dolorosos, no quieras correr ni exponerte en exceso. Poco a poco lo irás consiguiendo y el sufrimiento irá disminuyendo.

5. No solicitar día libre: Aislarse en casa solo contribuye a intensificar el martirio y la obsesión por el asunto, algo que no ayudará demasiado al objetivo de superar la situación y centrar la atención en el trabajo.

6. Descubrir lugares gratificantes: Encuentra pequeños espacios de bienestar, es necesario darse permiso para vivir y disfrutar.

7. No eliminar los recuerdos: Es importante permitir que los recuerdos surjan y compartir los buenos y malos momentos, no hay razón para ocultar el dolor o la alegría.

8. Proyectarse: Es aconsejable permitirse estar en duelo emocional, pero a la vez es positivo marcarse pequeñas obligaciones con la finalidad de no aislarse y recuperar por completo tu vida familiar, social, laboral y personal.

Ya lo sabes, sigue estos consejos y mantén la discreción sobre tus problemas personales para que no afecte tu vida laboral.