Emprendedor, elevator pitch o también llamado elevator speech, es un tipo de discurso que tiene como objetivo vender algo, ya sea una idea de negocios, tu empresa. También se define como una técnica que debes emplear al momento de hacer la presentación breve sobre un proyecto para que resulte convincente y permita atraer inversionistas a tu proyecto.

Esta herramienta puede venir bien a cualquiera: ya sea un emprendedor que necesita captar clientes, una persona que está buscando empleo y quiere presentarse ante un reclutador o un emprendedor que busca inversionistas. Los vendedores suelen ser expertos en esta técnica, aunque no la utilicen conscientemente.

Significado
El elevator pitch proviene de un juego de palabras “el discurso del ascensor” y es que su principal característica: es hacer una conversación breve y que venda. A continuación compartimos consejos para aprovechar al máximo esta técnica:

Aprovecha cada segundo. Puede ocurrir que te encuentres en la calle o en un evento con una persona de Recursos Humanos de la empresa donde te interesa trabajar. En un mundo tan conectado como el actual y en el que está tan de moda el networking (hacer contactos) no sería raro aplicar esta técnica. Por eso, debes tener preparado un elevator pitch que te ayudará mucho en cualquier situación.

Lograr un mensaje claro. Aunque suene contradictorio, el mejor truco para que algo salga natural y espontáneo es haberlo preparado. El elevator pitch es una técnica y como tal hay que trabajarla. No se trata de decir lo primero que se nos ocurra, sino todo lo contrario: un resumen en el que todo está estudiado palabra por palabra.

Se recomienda tener preparados varios discursos de ascensor de distinta duración.

Comunica lo interesante. Debes enganchar a tu interlocutor y déjale con ganas de saber más de ti o de la idea que le presentas. Por eso, pregúntate: ¿qué quiero conseguir con mi elevator pitch?

Lo que dices es importante pero cómo lo dices también. Por ello, si pones pasión y muestras entusiasmo en aquello que estás contando, convencerás mucho más.

Tus gestos son fundamentales. Para transmitir bien tu mensaje, trabaja en tu lenguaje no verbal. Controla los nervios y evitar titubear o bajar la mirada porque indicará inseguridad. No te cruces de brazos, muéstrate natural y evita invadir el espacio de la otra persona.

La despedida es clave. Lleva siempre tarjetas de visita contigo y al despedirte pídele la suya también. Sin resultar agobiante, dile que tienes interés en organizar un encuentro con más tiempo para continuar hablando. Si lo has hecho bien, se pondrán en contacto contigo rápidamente.