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¿Cuándo debo renovar los equipos de mi empresa?

¿Cuándo debo renovar los equipos de mi empresa?

Publicado el: septiembre 15, 2015

Los equipos y artefactos con los que una empresa cuenta para desarrollar su emprendimiento, son fundamentales para el éxito o fracaso de esta. Por ello, es preciso mantenerlos, si no a la vanguardia de la tecnología, con un funcionamiento óptimo.

Es muy común encontrar pequeñas empresas con pequeños capitales y grandes problemas tecnológicos. Y es que renovar la tecnología de una empresa no es un gasto ínfimo; sin embargo, ahorrar dinero en los instrumentos con los que se trabaja, disminuye la capacidad de éxito de la empresa, lo que se traduce directamente en una pérdida constante de futuros ingresos. Por ello, para animarte a cambiar esas máquinas obsoletas y oxidadas, aquí una lista promedio de lo que duran las tecnologías en una empresa.

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1.- Computadoras. Las computadoras son, quizá, los artefactos más difundidos en todas las oficinas del mundo, de allí que cuenten con una gran demanda y actualizaciones constantes. En promedio, la vida útil de una computadora es de 4 años sin ningún tipo de mantenimiento. Por ello, si una empresa espera mantenerse con las mismas computadoras por un periodo prolongado de tiempo, es necesario empezar un mantenimiento constante, actualizar con regularidad y repotenciarla cada vez que sea necesario; de lo contrario se trabajarán con máquinas lentas y con tendencia a congelarse, lo que produce un progresivo estrés en el usuario y  pérdida de tiempo y dinero en  el desarrollo de la empresa.

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2.- Tablet y Smartphone. Para aquellas empresas cuyos empleados deben estar en más de un punto físico a lo largo del día y precisen de tecnologías, los móviles inteligentes y las tablets, son ideales para ellos por hacer las veces de celular y computadoras. El “problema” con estas tecnologías es su periodo de vida, no mayor a 2 años, por lo que se debe considerar como gastos fijos cada 24 meses.

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3.- Hornos industriales. Los hornos pueden tener una larguísima duración siempre y cuando se tengan los niveles adecuados de mantenimiento. Por ejemplo, los quemadores deben ser revisados cada 3 meses al igual que la varilla de falla de flama; el sistema de lubricación automática debe ser verificado cada semana; los filtros del acondicionador, deben ser evaluados cada 2 meses, al igual que las tuberías y las espreas. Si los hornos no cuentan con un mantenimiento constante, pueden llegar a caducar muy pronto, generando altas pérdidas a la empresa y retraso en la producción.

Como ves, emprendedor, no hay excusa que valga al momento de renovar la tecnología en tu empresa, pues no le haces un favor a nadie sino a ti y a tus futuros ingresos.

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