Las personas entusiastas tienden naturalmente hacia la forma optimista de la inteligencia y así poder difundir a su alrededor una atmósfera de confianza, de alegría,  que hace que los otros confíen en ellos. Se rodean a sí mismos con un aura mental de éxito, irradian éxito y los que se les aproximan, inconscientemente participan de esa irradiación. El entusiasmo se desarrolla cultivando el interés, la confianza y el deseo por las cosas que hacemos. Aquí compartimos las principales características de las personas que transmiten entusiasmo:

‣ Encuéntrate a ti mismo: Es bastante difícil entusiasmarse si vives pendiente de la vida de otra persona. No ser uno mismo es tan agotador que no es extraño que sea difícil sentir entusiasmo. Para poder orientar esas energías debes, en primer lugar y ante todo, ser tú mismo. Al fingir ser alguien que no eres gastas todos esos recursos que podrías estar utilizando para hacer algo que realmente disfrutas y por lo cual podrías sentirte emocionado.

Las cosas que entusiasman a nuestros amigos no necesariamente nos entusiasman a nosotros, las cosas que llenan de satisfacción a otros no necesariamente nos llenan de satisfacción a nosotros. Por lo tanto, solamente siendo tú mismo, con naturalidad, es que podrás encontrar lo que te motiva y podrás aferrarte a ello.

‣ Averigua porqué te falta entusiasmo: Muy pocas personas se analizan de manera objetiva y se preguntan por qué no son más vivaz, pero sea cual sea la razón, probablemente tengas una sospecha del porqué y puede ser tu trabajo o tu vida amorosa. Es normal quedarse atrapado en la rutina, estas cosas pasan y en algún momento también terminan. Pero analiza que es lo que está produciendo la falta de entusiasmo.

‣ Comienza a pensar positivamente: Trata que cuando se presente una situación, siempre piensa en lo positivo que va hacer para tu vida, en que te va ayudar a superarte y porque sabrás que eres capaz de resolver. Solo así te sentirías mucho más motivado y más confiado para enfrentar los problemas.

‣ Define tus metas y cómo alcanzarlas: Ahora que al menos estás tratando de pensar positivo, pregúntate ¿cuáles son las metas que quisieras alcanzar?, ¿qué harías para poder alcanzarlas?, ¿por qué quisieras sentir entusiasmo? Es difícil entusiasmarse cuando se anda luchando por la vida sin ningún propósito. Debes saber exactamente lo que quieres hacer para conseguirlo.

‣ Convéncete a ti mismo: Es correcto y bueno tener metas, pero debes creer realmente en que puedes alcanzarlas. Hazlo hasta que creas que tu meta se ha convertido en algo que puedes hacer posible. Si tu meta es realista, la única cosa que te puede frenar es tú mismo. Asegúrate que tus metas sean factibles, emprende cosas más a tu alcance que sean totalmente realizables y totalmente útiles.

‣ Supera tu miedo al fracaso, a tomar una mala decisión: A menudo, cuando no estamos entusiasmados, es porque nos hemos inventado alguna excusa para tener un motivo de no estarlo. No queremos entusiasmarnos porque no queremos elevar nuestras esperanzas, porque estamos muy inseguros de serlo o porque nos preocupa que otros nos juzguen. No dejes que tu entusiasmo se vea desalentado y afectado por otros o por tus inseguridades.

Ya lo sabes emprendedor, toma en cuenta estos consejos para que seas una de las personas que irradian entusiasmo.