Publicado el: abril 27, 2017
Las personalidades tóxicas son contagiosas y contribuyen a que se generalice una especie de paranoia social. Por ello para triunfar en la vida hay que ser un buen manipulador.
Para evitar llegar a este punto, te dejamos tips para identificar y reconocer a las personas tóxicas a primera vista.
1. Los amigos tóxicos tienen una gran capacidad psicológica, adivinan los temores y fantasmas de sus presas para saber cómo seducir a sus víctimas. Primero nos hacen creer que, con ellos, todo es posible, para luego manipularnos a su antojo. Como buenos manipuladores que son, saben adaptar su comportamiento, pero también sus principios y valores, en función de sus víctimas.
2. Saben darle la vuelta a una situación con mucha habilidad, llegando a presentarse como víctimas cuando en realidad son verdugos. Se trata de una falsa victimización, con el objetivo de seducir y limpiar el terreno para servirse de los demás cuando lo necesiten.
3. Son expertos en deformar la realidad mediante las mentiras parciales y el juego del doble lenguaje, puesto que controlar el discurso es una forma de controlar el pensamiento. Pueden mezclar insultos y halagos amables en la misma frase sin apenas inmutarse.
4. Son como depredadores, vampiros que no respetan la autonomía de los demás y les imponen sus propios criterios. Si al estar con ellos, una y otra vez nos sentimos cansados mentalmente, entonces debemos tomar nota porque es una alarma de que estamos siendo intoxicados.
5. No tienen principios o estos varían en función de sus objetivos o contexto y tratan de que los demás se alejen de su particular escala de valores.
6. Son impermeables a la culpabilidad y logran que seamos nosotros quienes nos sintamos mal.
7. Son excelentes estrategas, pacientes y constantes hasta que consiguen sus objetivos, pero poco creativos.
8. Les gusta sembrar la duda sobre las cualidades y las competencias de los demás para descalificarlos y eliminar su autoestima.
9. Esconden una incoherencia entre su discurso y su comportamiento: por un lado se llena la boca con propuestas altruistas, mientras que luego actúan sólo en base a su interés personal.
10. Los tabúes morales no existen para los “buenos intoxicadores”, puesto que conciben a los demás no como una persona digna de respeto o compasión, sino sólo como un objeto más o menos útil.lenguaje, puesto que controlar el discurso es una forma de controlar el pensamiento. Pueden mezclar insultos y halagos amables en la misma frase sin apenas inmutarse.
11. Son como depredadores, vampiros que no respetan la autonomía de los demás y les imponen sus propios criterios. Si al estar con ellos, una y otra vez nos sentimos cansados mentalmente, entonces debemos tomar nota porque es una alarma de que estamos siendo intoxicados.
12. No tienen principios o estos varían en función de sus objetivos o contexto y tratan de que los demás se alejen de su particular escala de valores.
13. Son impermeables a la culpabilidad y logran que seamos nosotros quienes nos sintamos mal.
14. Son excelentes estrategas, pacientes y constantes hasta que consiguen sus objetivos, pero poco creativos.
15. Les gusta sembrar la duda sobre las cualidades y las competencias de los demás para descalificarlos y eliminar su autoestima.
16. Esconden una incoherencia entre su discurso y su comportamiento: por un lado se llena la boca con propuestas altruistas, mientras que luego actúan sólo en base a su interés personal.
17. Los tabúes morales no existen para los “buenos intoxicadores”, puesto que conciben a los demás no como una persona digna de respeto o compasión, sino sólo como un objeto más o menos útil.
Etiquetas: emprendedores, personas tóxicas